Miedo a olvidar

“Deja de soñar que eres capaz de volar con imponentes alas blancas entre densas nubes hasta tocar el Sol, mísero consuelo del que crea imágenes mentales que no son más que el reflejo de la estupidez del que es ciego al horror de la creación”.

Esas fueron las primeras líneas que plasmó en lo que era el inicio de su autobiografía, quería dejar evidencia de lo que para él fue una vida después de la muerte de papá y mamá llena de odio, tristeza y días de entera agonía. 

Antes de cumplir la mayoría de edad era un joven que junto a su familia vivía en estado de gracia y felicidad, recuerdos que se tiñen de negro cuando al cumplir veinte la partida de sus padres lo dejaron muerto en vida y en dolorosa soledad. 

“Deja de soñar que eres capaz de volar con imponentes alas blancas entre oscuras nubes hasta sentir sobre tu rostro el calor del rayo del Sol, mísero consuelo del que es ciego a la realidad, sonrisas falsas que a ojos inocentes pretenden ser honestas y no son más que espejismos que disfrazan de sus intenciones la verdad”. 

Texto autobiográfico de un hombre poéticamente masacrado por la vida, historia personal colmada de episodios inundados de dolor, pasajes de un cuento de hadas que al tiempo se convirtieron en tragedia escrita con tinta que salía de las heridas de su corazón; historia que transformó la alegría en noches oscuras habitadas por espectros, mismos que no hacían más que gritar en su rostro y alimentar su carne putrefacta de sus insípidos deseos.

Iluso a la oscuridad que invadiría el brillo de su mirada hasta por completo apagarla, ignorante de las lágrimas que sus ojos derramarían sobre las garras del monstruo que lentamente se alimentaba de su casi inexistente alma, se decía a él mismo todas las noches que deseaba desaparecer del plano terrenal, deseaba terminar su historia escrita y entre letras transformar su cuerpo en una hermosa estrella fugaz. 

Su historia de vida narraba bellas anécdotas a lado de la mujer que en su vientre lo concibió, algunas otras retrataban en su imaginación momentos al lado del hombre de barba blanca que lo cuidaba y amaba sin condición, era una historia personal en narrativa perfecta, tan bella y triste al mismo tiempo, capaz de enmudecer la voz de los fantasmas que ahora lo acompañaban hacia un futuro incierto. 

Finalmente llegó el momento en donde los latidos del corazón de la mujer y el hombre que en vida él amaba infinitamente se detuvieron, finalmente llegó el momento en donde no pudo continuar más con la historia pues sus manos dejaron de escribir el capítulo en donde sus padres fallecieron, dolor sentía en cada centímetro de su débil cuerpo, indefenso estaba ante la posibilidad de destrozar la obra que enmarcaría el final de sus días de sufrimiento. 

No pudo más, no era capaz, decidió nunca más escribir, sentía que si plasmaba sobre la hoja de papel el dolor que sentía por la partida de su madre y padre ya no sería capaz de sentir, sentir tristeza, sentir melancolía, sentir desesperación, creía que liberarse de sus oscuros sentimientos era un miserable acto hacia la vida de cobarde traición. 

“Deja de soñar que eres capaz de volar con imponentes alas blancas entre oscuras nubes hasta sentir sobre tu rostro el calor del rayo del Sol, mísero consuelo del que es ciego a la realidad, sonrisas falsas que a ojos inocentes pretenden ser honestas y no son más que espejismos que disfrazan de sus intenciones la verdad”. 

Decidió el dolor, decidió la frustración. 

Eligió llorar en silencio en medio de la oscuridad, decidió disfrazar su soledad entre risas falsas que a ojos inocentes pretendían ser honestas y ocultar de sus emociones la verdad. 

Arturo.

Publicado por colorearconletras

Escribir lo considero una manera de transformar nuestras ideas en algo real. Es ser leal a lo que conforma nuestros pensamientos, es respetar lo que en nuestro interior somos.

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